STANLEY GREENE
- conquistarte
- 29 jun 2014
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Stanley Greene documenta en su libro 'Never Quiet on the Western Front', el movimiento punk de San Francisco durante la década de los 70; retratando con crudeza y sinceridad las bizarras situaciones de aquellos años. Formando parte de los ambientes que fotografiaba, Greene pudo adentrarse en los bares, los backstages y los pisos de los punks para plasmar en imágenes el movimiento musical, social y cultural en todo su esplendor.
El punk en la ciudad de San Francisco fue popularmente llamado "Art and Music", por tener su origen en la escuela de arte de la ciudad. Mientras por el día estudiaba allí, Greene salía de noche para documentar todo lo que ese movimiento llevó a la ciudad.
"¿Qué podías hacer un Sábado por la noche? En vez de ver algo en la tele, pues coges tu cámaras y sales a hacer fotografías", comenta el autor de la serie, que publicó en forma de libro titulado 'Never Quiet on the Western Front' (Andre Frere Editions). El libro contiene más de 100 imágenes acompañadas de texto que explican tanto la historia de la fotografía como la participación del propio Greene en la situación. "Los grupos de música me dejaron fotografiarles con sus novias, durmiendo, follando, o drogándose. Fue la mejor, más estridente y a la vez más tranquila época de mi vida. Las situaciones se volvían más locas cuanto más me drogaba, era simple. Había un equilibrio", comenta Greene.
Todas las fotografías son únicas. Irradian el ambiente y filosofía punk en la que se desafían las convenciones y donde la agresividad es una forma de vida. Greene consigue retratar todas las situaciones bizarras en las que formó parte no de forma casual, sino porque la efervescencia cultural estadounidense durante los 60 y 70 fue máxima, esa efervescencia que vivió como sus protagonistas: rápida y fugazmente. Se apresuró en formar parte de la situación para entrar hasta el fondo y fotografiar el punk desde sus entrañas, con la consciencia de que todo se iba a acabar más rápido de lo que quisiera; la proximidad y crudeza es lo que dota de valor a estas fotografías.
